Hace ya un tiempo publicamos en este mismo blog una completa guía de instalación de macOS Ventura en equipos de Apple no compatibles. Pero el tiempo ha pasado y Apple ha desarrollado nuevos sistemas operativos para sus dispositivos con muchas novedades y corrección de errores, siendo el último de ellos macOS Sequoia (O si lo nombramos por el número de versión, macOS 15).
Ya lo sé. Pero oye... no todo el mundo tiene pasta como para cambiar de ordenador cada poco tiempo y así poder tener siempre el sistema actualizado. Mi Macbook ya no es compatible con los últimos sistemas operativos, así que se tendrá que quedar con Ventura. ¡Qué se le va a hacer! A lo mejor puedo vender el ordenador por cuatro duros y así...
¡Espera! No seas impulsivo. Tienes que saber que al igual que hemos hecho con MacOS Ventura podemos hacer lo mismo con la última versión de macOS que Apple ha publicado (al menos a la fecha de escritura de este artículo). En muchos de los Mac que Apple ha decidido que no son compatibles con macOS Sequoia, un pequeño parche permite obrar el milagro. Dónde Apple decía que no podía instalarse Sequoia, ahora se puede instalar sin que el usuario note el más mínimo problema.
Como ejemplo fíjate: lo que te voy a enseñar ahora es un equipo que tengo yo en casa. Es del año 2013 por lo que hace años que ya no soporta las últimas versiones de macOS y sin embargo logro que corra sin el más mínimo problema macOS Sequoia gracias al método que os vamos a explicar en este artículo.
Ya, ya... pero te estás haciendo trampas al solitario. Ese es un equipo profesional con unas características extraordinarias para su tiempo. Un equipo de esa época pero más modesto seguro que ya no es capaz de hacer funcionar Sequoia.
Vuelves a equivocarte, Usuario Anónimo. Mira: el equipo desde el que te estoy escribiendo este artículo (y editando sus imágenes) es este otro.
Es un Mac Mini del año anterior, así que estamos hablando de un equipo de hace 12 años a fecha de escribir el artículo. Y he de decir que con Sequoia funciona tan bien como el primer día, con un rendimiento fantástico.
Oye... ¿Y hacer esto no es sumamente ilegal? ¡A ver si me voy a meter en un fregao!
Para nada. La licencia de macOS prohíbe explícitamente instalar cualquier versión de macOS en un ordenador que no haya sido fabricado por Apple ni en una máquina virtual. Por tanto exige que sea instalado en un mac. Sin embargo ese es el único requisito y no dice nada acerca de instalarlo en un equipo no compatible. Así que legalmente podemos instalarlo, pero deberíamos tener siempre claro que si rompemos algo Apple no nos va a dar jamás soporte de ningún tipo.
Es una situación similar a la que pasa con Microsoft y Windows 11. Si tenemos una licencia de Windows 10, la licencia nos permite actualizar a Windows 11. Si nuestro equipo no es compatible no nos va a ofrecer la actualización, pero la licencia no pone nada acerca de que si consigo hacer mi equipo compatible de alguna forma (ya sea actualizando hardware o con algún otro método) no pueda hacer la actualización legalmente.
Resumiendo: el acuerdo de licencia de macOS, siempre y cuando tengamos un MAC, nos permite actualizar a Sequoia. Si lo hacemos aplicando parches, Apple no nos dará soporte de ningún tipo y se desentenderá de cualquier problema que pueda producirse, pero legalmente podemos realizar la instalación.
Así que empecemos, y creo que lo mejor que podemos hacer es comenzar por algo que debemos hacer antes de aventurarnos con cualquier actualización importante: realizar una copia de seguridad.
Como norma general, debéis tener grabado a fuego que antes de hacer algo «gordo» en vuestro ordenador, deberíais hacer una copia de seguridad de todos los datos para poder recuperar todo en caso de desastre.
Me estás metiendo miedo. ¿Realmente es algo tan peligroso?
No lo es en absoluto. Ninguno de los equipos que he actualizado a Sequoia han tenido por el momento ningún problema, pero eso no quiere decir que no debamos ser precavidos. Por suerte los Mac tienen una excelente utilidad de serie para hacer copias de seguridad, llamada «Time Machine». Aprovechad ahora para conectar un disco externo a vuestro Mac y hacer una copia de seguridad completa con Time Machine. No tiene por qué pasar nada, pero gracias a ella estaréis cubiertos ante posibles desastres.
¿Y eso de hacer un backup con Time Machine cómo lo hago?
Apple te da instrucciones completas de cómo hacerlo en esta página, así que si aún no has hecho ninguna copia de seguridad, revisa esa página y haz un backup del sistema completo ahora mismo.
Una vez que hemos realizado la copia de seguridad y antes de empezar, vamos a ver qué equipos podemos actualizar a macOS Sequoia de forma oficial y en cuáles debemos usar el parche para actualizarlos. Así despejaremos dudas de si tu equipo en concreto va a poder actualizarse oficialmente, si necesita un parche para actualizarse o directamente no puede actualizarse de ninguna de las maneras.
1. Equipos actualizables a macOS Sequoia de forma oficial.
Esto seguro que lo habéis visto en montones de páginas web. Los equipos que se pueden actualizar a macOS Sequoia sin necesidad de instalar ningún parche son los siguientes:
Modelo de ordenador MAC | Año mínimo de presentación | Número mínimo de modelo |
Macbook Air | 2020 | MacBookAir8,1 |
Macbook Pro | 2018 | MacBookPro15,1 |
iMac | 2019 | iMac19,1 |
Mac Mini | 2018 | Macmini8,1 |
Mac Studio | Todos son compatibles | Todos son compatibles |
iMac Pro | Todos son compatibles | Todos son compatibles |
Mac Pro | 2019 | MacPro7,1 |
Si tenéis algún modelo de Mac igual o superior a los de la lista que os acabo de poner, entonces podéis instalar macOS Sequoia nativamente y de forma muy sencilla. Simplemente tendréis que ir a los ajustes
de vuestro Mac y dentro de la categoría General
pulsar en Actualización de software
. Una vez que os aparezca la actualización, simplemente habría que pulsar en la tecla «Actualizar ahora» y seguir las indicaciones.
El proceso podría demorarse aproximadamente un máximo de 30-45 minutos. Al terminar, nuestro sistema estará completamente actualizado.
Ya, ya... pero aquí no estamos para esto. ¿Puedes centrarte, por favor? ¿Cómo puedo instalar Sequoia en un equipo que no lo admite? Mira que le das vueltas a las cosas.
Por una vez y sin que sirva de precedente te voy a dar la razón. Vamos ya mismo al grano.
2. Instalación en un equipo no compatible que no estuvo parcheado nunca.
En este punto vamos a profundizar en cómo realizar la instalación de macOS Sequoia en un Mac no compatible con Sequoia, pero que tiene instalada alguna versión de macOS original, es decir, que nunca lo hemos parcheado para instalar una versión no compatible del sistema operativo.
Ufff.. Empieza lo duro. Se me alisan los pelos del pubis de pensar lo complicado que va a ser esto. Virgencita, virgencita, haz que no se me funda el mac con ésto que si no...
Tranquilízate y respira, Usuario Anónimo. El proceso es largo pero no es en absoluto nada complicado, ya verás.
2.1. Equipos compatibles con nuesto parche.
Antes de empezar debemos revisar si nuestro Mac va a poder mover Sequoia con los parches que os voy a proponer. El listado «oficial» (de los desarrolladores de los parches) de los Macs que podemos actualizar con este sistema es el siguiente:
¡¡Guau!! ¡Mola! Parece que cualquier Mac fabricado desde 2008 en adelante puede correr entonces Sequoia sin problemas con este parche. ¡Genial!
Para, para. No tires aún los confetis, porque si la gráfica de tu Mac no es compatible con la tecnología «Metal» la fiesta más bien va a ser una siesta. Me explico:
Metal es una tecnología gráfica que sólo pueden usar Macs diseñados desde el 2012 en adelante. Si tu Mac no admite esta tecnología, el parche que os propongo va a permitir instalar Sequoia sin problema en el equipo, pero además de ir todo el sistema más lento de lo debido va a haber unas cuantas aplicaciones que no funcionen correctamente. Así que si vuestro Mac es de alguna generación entre el 2008 y 2012, os recomiendo que instaléis Catalina, que es el sistema operativo más moderno que corre sin problema en cualquiera de estos equipos (eso sí, tendréis que usar este parche para poder instalar Catalina).
Si vuestro equipo es del 2012 en adelante, podemos continuar con tranquilidad.
2.2. Descargamos el parche para instalar Sequoia.
Venga, vamos al lío. El primer paso es descargar el programa que va a hacer la magia. Necesitaremos entrar en la siguiente página.
https://github.com/dortania/OpenCore-Legacy-Patcher/releases
Si os fijáis, ahí están todas las versiones que se han realizado de este parche (y ya van unas cuantas). Revisad la última versión, que es la que está arriba de todo. En la parte inferior de esa versión, aparecerá un apartado llamado «Assets
«. Ahí veréis una serie de enlaces similares a éstos.
Ahí tendréis que buscar el enlace terminado en «.zip
«. En la versión actual se llama «OpenCore-Patcher-GUI.app.zip
«.
Oye, ponlo fácil para todo el mundo. ¿Por qué no nos das el enlace directamente? ¡Cómo te gusta complicar las cosas!
Porque a lo mejor, cuando leáis este artículo hay una versión superior del parche, así que prefiero que lo reviséis vosotros mismos. Con estas indicaciones que os estoy dando siempre os estaréis bajando la última versión.
Una vez descargado, lo descomprimimos y lo ejecutamos. Posiblemente os salga una ventana similar a ésta.
Debéis pulsar en «Abrir», pero el sistema es desconfiado y os va a pedir una cuenta de un usuario administrador del equipo para continuar. Debéis poner el usuario y contraseña de un usuario administrador de vuestro Mac.
Después de unos segundos, tendremos abierta la aplicación que nos permitirá parchear el sistema, y tendrá este aspecto.
Es muy importante saber que si se complica la instalación, el programa tiene soporte telefónico al que se puede acudir pulsando primero en «Support» y luego en «Official Phone Support».
¿Pero qué me dices? A ver, voy a probar...
¡¡No me lo puedo creer!! Los creadores del parche son más trolazos que tú. ¡Acabo de ser RickAndRoleado!
Ahora que tenemos el programa instalado, tenemos que tener claro los pasos que hay que dar para actualizar el sistema. Tendremos que hacer lo siguiente:
- Crear un USB de instalación de Sonoma.
- Parchear el USB para que arranque en nuestro MAC.
- Con ese USB, vamos a instalar Sonoma en nuestro equipo.
- Una vez que tengamos Sonoma instalado en nuestro MAC, debemos parchear nuestro MAC para que corra sin problemas.
Así que no nos demoremos más y empecemos.
2.3. Creación del USB de instalación de Sonoma.
En la pantalla principal del programa «OpenCore Legacy Patcher» debemos pulsar el botón «Create macOS Installer». Al momento nos saldrá una imagen como ésta.
¿Qué está pasando? Pues que para crear una unidad de instalación de Sequoia para nuestro equipo, primero debemos descargar el sistema operativo entero de Sonoma. Como no lo tenemos aún, vamos a pulsar sobre la opción «Download macOS Installer».
Lo que nos aparecerá ahora es una lista de sistemas operativos que podemos elegir para instalar en nuestro Pen Drive.
No entiendo. ¿Pero todo esto no es para instalar Sequoia? ¿Por qué nos da la opción de descargar versiones más antiguas de macOS?
Pues porque a lo mejor, por el motivo que sea, queremos instalar en nuestro equipo una versión anterior. En nuestro caso, como queremos instalar Sequoia le damos a la opción correspondiente y pulsamos el botón «Download».
Inmediatamente, OpenCore Legacy Patcher se pondrá a descargar la última versión disponible del sistema operativo seleccionado. Fijaos que, dado el peso del sistema, vamos a necesitar un dispositivo USB con una capacidad mínima de 16 GB de almacenamiento para instalar el sistema. Así que id buscándolo mientras se descarga todo, que esto le llevará un buen rato.
Una vez descargado el sistema, éste quedará ubicado en la carpeta de aplicaciones de nuestro Mac (Exactamente igual que si se hubiera descargado del Mac App Store). No pulséis en él ni nada por el estilo. Simplemente os digo la ubicación a modo de curiosidad. OpenCore Legacy Patcher ya se va a encargar de todo él solito.
Lo siguiente que nos preguntará el sistema es qué sistema operativo vamos a querer poner en el Pen Drive. Escogemos macOS Sequoia.
De nuevo pregunto ¿Por qué me da a escoger algo si sólo está esa opción.
Pues porque si quieres, en el paso anterior puedes descargar varios instaladores de varias versiones diferentes de macOS. Si haces así, llegarías a tener varios programas de instalación de las diferentes versiones de macOS en la carpeta de aplicaciones y podrías elegir cualquiera de ellos. ¿Qué utilidad tiene esto? Pues a lo mejor te interesa hacer varios dispositivos USB con diferentes versiones de macOS por el motivo que sea. Es decir, que si queremos, podemos ir a las ventanas anteriores y descargar también Sonoma o Ventura y gracias a esta ventana que nos ha salido ahora, podríamos escoger la versión que queremos instalar en nuestro dispositivo USB.
Ahora debemos escoger el dispositivo USB en el que lo vamos a instalar y…
¡¡¡ESPERA!!! ¡Tengo una crisis! ¿Cómo puedo instalar esto en un Pen Drive? Mi Mac no tiene puertos USB normales. Sólo tiene puertos USB tipo C. No puedo poner un Pen Drive aquí.
Si tu mac no tiene puertos USB normales y no tienes ningún pen drive USBC tienes tres opciones.
- Te agencias un adaptador de USBC a USB normal. Algo como esto.
- Compras un adaptador algo más caro pero que en el futuro seguro que le sacas más partido por ser multidispositivo. Algo cómo esto otro.
- Te compras un pen drive USBC como este o similar.
Cualquiera de esas tres opciones te solucionará el problema.
¿Dónde íbamos? ¡Ah, sí! Habíamos insertado un dispositivo USB en nuestro Mac y nos salía esta pantalla en la que hemos escogido el dispositivo insertado.
El sistema querrá asegurarse de que estamos haciendo todo bien y nos preguntará si estamos seguros de lo que hacemos, porque lo que va a pasar a continuación es que el dispositivo USB va a borrarse por completo y a perder todos los datos. Si estamos seguros de que no contiene información vital, pulsamos en «Yes».
Ahora el programa empezará a escribir todos los datos en el Pen Drive poco a poco. Muy poco a poco. Así que aprovechad para ir a tomar un café, que esto tardará unos 20-30 minutos.
Después de un buen rato tendremos por fin el instalador de macOS Sequoia dentro del Pen Drive. Esto nos permitirá instalar Sequoia en un Mac compatible, pero no en nuestro equipo. Para que funcione en nuestro Mac hay que parchear el Pen Drive. Por fortuna, con OpenCore Legacy Patcher todo el proceso está automatizado y al terminar de grabar el USB el sistema nos preguntará si deseamos aplicar los parches necesarios. Así que le decimos que sí.
Ahora el programa recopilará los parches necesarios para nuestro equipo y los grabará en el Pen Drive.
Bueno... para nuestro equipo y para cualquier otro en el que quiera instalar Sequoia ¿no?
Pues no. Fíjate que en la siguiente captura podéis ver cómo he estado aplicando este parche en un MacBookPro13,3. OpenCore Legacy Patcher crea un dispositivo de instalación específico para tu hardware. Si necesitas instalar Sequoia en un Mac de un modelo completamente distinto tendrás que crear de nuevo el Pen Drive pero con los parches adecuados a ese modelo.
Al finalizar la recopilación de los parches para tu equipo, el sistema te preguntará si los aplica a tu dispositivo USB. Pulsad en «Install to disk».
Ahora, por favor, sed muy cuidadosos en este paso. Tenéis que seleccionar la unidad USB en la que se van a aplicar los parches. Aparecerá una lista de las unidades que tiene vuestro equipo. Mirad el final de cada línea dónde se indica la capacidad de cada unidad de almacenamiento que hay conectada en el Mac. Cuando estéis seguros de cuál de ellas es vuestra unidad de almacenamiento USB, seleccionadla. En el ejemplo que os pongo aquí abajo, sería la línea que pone «disk3 – Cruzer Blade – 63.1 GB».
Ahora, dentro de la unidad USB, hay que seleccionar la partición EFI. Suele ser una unidad muy pequeña de menos de un GB de almacenamiento. La seleccionamos.
OpenCore Legacy Patcher ahora copiará todos los parches a nuestra unidad USB y nos pedirá reiniciar el equipo. Le vamos a dar a «Reboot» y mantendremos conectada la unidad USB a nuestro ordenador.
Pero ahora tendréis que tener mucho cuidado. En cuanto la pantalla se ponga de color negro, debéis mantener presionada la tecla «Alt» (en algunos Mac pone «Option» o el símbolo ⌥), al menos hasta que nos aparezca un menú «extraño» en el ordenador.
2.4. Instalación de macOS Sequoia en nuestro Mac
Si hemos seguido las instrucciones anteriores, después de un rato de pulsar la tecla «Alt» durante el arranque tendremos una pantalla similar a ésta.
Esto es un menú de arranque. Debemos selecciónar que el sistema debe arrancar desde «EFI Boot». Después de pulsar esa opción, nos saldrá de nuevo una pantalla muy similar.
En este caso debemos seleccionar «Install macOS Sequoia». Ahora el ordenador empezará a cargar el instalador desde la unidad USB, por lo que es normal que nos tarde en arrancar algo más de lo habitual. Después de un rato debería salirnos algo como ésto.
Ahora, dependiendo de lo que queramos hacer, pulsaremos en una opción u otra. Si queremos borrar el disco por completo (mucha gente aprovecha estas instalaciones para hacer limpieza), deberíamos pulsar en «Utilidad de Discos». Recordad: esto que vamos a hacer en la utilidad de discos es sólo si queréis borrar por completo vuestro disco duro. Si no queremos borrar nada pulsaríamos sobre «Instalar macOS Sequoia», pero eso ya lo explicaremos más adelante.
Después de pulsar en la parte izquierda de la ventana el grupo de Volúmenes de nuestro disco duro, seleccionaríamos «borrar». En la ventana que nos sale, debemos asegurarnos que el desplegable «Formato» tenga seleccionada la opción «APFS» para luego pulsar Borrar.
En todo caso, hayamos borrado el disco duro o no, lo que debemos hacer ahora es ir a la opción «instalar macOS Sequoia». Recordad que si no hemos hecho el paso de borrado del disco duro, si todo va bien no deberíamos perder ninguna información del disco (Sequoia se instalará por encima y tanto archivos como programas deberían seguir instalados en nuestro sistema). En el peor de los casos, si algo va mal, podríamos tirar de la copia de seguridad. Porque me habéis hecho caso y habéis hecho una copia antes de empezar todo esto ¿Verdad?
Ehhhh... claro, claro... ¡Cómo no iba a hacer una copia! ¿Por quién me tomas? Estooo... si no respondo en un rato es que estoy... hablando... por teléfono. ¿Vale?
(¿Dónde $%&#@ he puesto yo ese disco externo...?)
Después de darle a «Instalar macOS Sequoia» veréis una pantalla de bienvenida. Puulsamos en «Continuar».
Ahora veréis las condiciones de la licencia del software. Os aconsejo leer toda del principio al final. Es una lectura apasionante. Cuando terminéis pulsad en «Acepto», porque si no no podréis continuar.
Como nos hemos leído toda la licencia, pulsamos de nuevo en el botón «Acepto». (Ya les vale. ¿Cómo voy a pulsar en acepto sin leer las condiciones de la licencia? ¿Por quién me toman?).
Ahora debemos seleccionar el disco en el que vamos a instalar macOS Sequoia. Seleccionamos la unidad de disco interno de nuestro Mac (En el ejemplo se llama «Disco Duro»).
Y ahora empezaremos la instalación del sistema operativo. Os aviso que se pasará instalando bastante tiempo con algún reinicio del sistema completo incluido. No toquéis absolutamente nada hasta que termine la instalación.
Después de un buen rato volveréis a ver la pantalla en la que podéis hacer login en vuestro Mac. Poned vuestro usuario y contraseña.
Es factible que nada más logarnos el sistema nos pida aceptar los términos y condiciones nuevos de icloud y de los servicios multimedia de Apple. Por supuesto, leed las condiciones de los contratos (faltaría más) y pulsad en «Acepto».
2.5. Instalando los parches adecuados en nuestro disco duro.
LLegados a este punto ya estamos corriendo macOS Sequoia en nuestro equipo.
Posiblemente, pero veo que va todo un poco a pedales. Además hay cosas que no se ven correctamente. Me has engañado. Esto va fatal. ¡Devuélveme el dinero!
Tranquilo. A estas alturas es algo normal. El sistema ha arrancado gracias a que teníamos el dispositivo USB conectado al Mac (porque si no, ni siquiera hubiera arrancado). Además le faltan todos los drivers y parches necesarios para que funcione de forma fluída. Por fortuna, mientras estás leyendo esto seguro que te ha saltado esta ventana en tu recién estrenado Sequoia.
Esa ventana nos informa precisamente de todo lo que os acabo de decir. Primero hay que instalar los parches que permitirán arrancar Sequoia sin tener el pincho USB conectado y luego los parches para acelerar todo. En el caso (bastante improbable) de que no os salga esta ventana por si sóla, podéis ejecutar Open Core Legacy Patcher y pulsar en «Build and install OpenCore».
Si os ha salido esa ventana debéis pulsar en «Aceptar» y después de recopilar algunos parches, el sistema nos dirá algo como ésto.
Pulsaremos en «Install to disk» y nos saldrá otra ventana preguntándonos en qué disco vamos a poner esos parches. Evidentemente vamos a ponerlos en el disco desde el que arrancamos normalmente nuestro Mac (en su disco interno), así que lo seleccionamos.
Seleccionamos también la partición EFI de ese disco (salvo que hayáis hecho cosas raras en vuestro equipo, sólo debería aparecer una).
Ahora OpenCore Legacy Patcher instalará los parches necesarios en el disco para que el sistema arranque sin necesidad de ningún dispositivo USB. Pero en cuanto termine, el propio sistema se dará cuenta de que también debería instalar los parches para que todo en el sistema funcione correctamente (gráficos, dispositivos internos, etc…). Así que en cuanto nos pregunte si los instala, pulsamos «Yes» de inmediato.
Ahora podréis ver la lista de Parches que deberíamos instalar en nuestro Mac. Para instalarlos, debemos pulsar en «Start Root Patching».
Ahora se nos instalarán los parches poco a poco. Al terminar, se nos preguntará si podemos reiniciar el equipo. Pulsaremos en «Reboot».
Y listo. En el siguiente reinicio el sistema se habrá iniciado sin ningún problema. Ya no necesitaremos tener el dispositivo usb conectado para arrancarlo y todo irá a la velocidad a la que ya estamos acostumbrados. Por fin tenemos Sequoia completamente operativo en nuestro Mac.
3. Instalación en un equipo no compatible que ya estaba parcheado con alguna versión anterior de OCLP.
Si nuestro sistema estaba ya corriendo alguna versión antigua de macOS mediante OpenCore Legacy Patcher todo el proceso es mucho más sencillo, porque vamos a poder saltarnos casi toda la primera mitad de la instalación (siempre y cuando tengamos OpenCore Legacy Patcher actualizado hasta la última versión, claro).
En este caso lo que haremos, es ir a los ajustes del Mac y en «general» Comprobar si hay actualizaciones. El sistema detectará que hay una versión de macOS disponible. Pulsaremos en «Actualizar ahora».
Ahora nos pedirá que leamos toda la licencia para aceptar sus términos y condiciones. Como supongo que no tendréis nada mejor que hacer durante las próximas horas, os paráis a leer cuidadosamente toda la licencia y luego pulsáis en «Acepto».
La instalación de macOS Sequoia habrá comenzado pero os anuncio que habrá una sorpresa.
Y es que inesperadamente, OpenCore Legacy Patcher detecta que estamos intentando actualizar a Sequoia y nos ofrece preparar el sistema para la actualización (mientras la estamos descargando de fondo). Le vamos a dar a «Ok».
Ahora, mientras se está descargando Sequoia, a la vez se estarán descargando los últimos parches para este sistema operativo. De forma oculta, en cuanto los descargue, los preparará para que todo vaya bien durante la actualización.
En cuanto terminen ambos procesos, el ordenador nos pedirá un reinicio con éste mensaje.
A partir de ahora todo será exactamente igual a lo que hemos visto en el paso 2.5. Se instalará Sequoia en nuestro mac y al iniciar el sistema OpenCore Legacy Patcher detectará que no estamos corriendo los parches adecuados (porque se los habrá cargado la instalación de macOS). OpenCore los instalará y luego reiniciará la máquina, y con eso todo el sistema quedará completamente actualizado.
4- Impresiones finales
Para todos aquellos que desconfíen de estos parches, indicar que llevo muchos años trabajando sobre equipos con este tipo de parches instalados y jamás he tenido ni un sólo problema con ellos. Si seguís todas las indicaciones que os he ido dejando, no sólo podréis actualizar sin problemas, sinó que podréis trabajar con vuestro Mac de la misma forma que si fuera un equipo completamente compatible.
El único problema que he llegado a ver ha sido algún usuario que no ha aplicado las actualizaciones de OpenCore Legacy Patcher cuando el sistema se las ofreció. Si no actualizas OpenCore según van saliendo sus actualizaciones, corres el riesgo de que una actualización de macOS rompa el sistema (porque no tienes drivers actualizados). Siempre que salga una actualización del sistema operativo recomiendo esperar unos días por si los desarrolladores de OpenCore Legacy Patcher sacan algún ajuste específico para esa actualización. Si en una semana no han sacado nada, es seguro actualizar el sistema. Y si han sacado un parche específico para la actualización normalmente es tan sencillo como aplicar primero el parche y luego actualizar macOS.
Con todo esto estáis preparados para actualizar vuestro Mac por vosotros mismos. ¿Qué os parece este método? ¿Funciona bien vuestro mac después de la actualización? ¿Habéis tenido algún problema actualizando? Estaré atento a todos vuestros comentarios.
me quedo con lo de actualizar windows 10 a 11 en equipos no compatibles. espero ese artículo!
A mí me sale para actualizar a Sequoia porque ya utilicé el parche anteriormente pero no me salta el opencore durante la descargar. ¿Qué puedo hacer?
Con el ordenador conetado a internet, abre el Opencore y espera un minuto. Si no te salta nada, eso es que tienes instalada ya la última versión del OpenCore (Si no, te debería saltar que hay una versión nueva y se actualizaría sóla). Si no te salta nada del opencore, realiza igualmente la actualización mediante OTA (con el actualizador del propio sistema operativo). Lo más probable es que OpenCore ya haya hecho todos los ajustes por detrás para que la actualización se realice correctamente. Las últimas versiones del OpenCore van muy bien en ese sentido.